Principios Terapéuticos Clave: Intercambio, Consejos, Visión y Conflictos

Principios Terapéuticos Comunes

1. Intercambio de Pago por Servicio

Describe el proceso del pago de una cuota por parte del cliente a cambio de un servicio. Se señala que el terapeuta ofrece un servicio y recibe una compensación económica. La relación se basa en un diálogo socrático, fundamentado en la idea de que la colaboración entre terapeuta y cliente potencia la búsqueda de soluciones a los problemas del cliente, sumando recursos de ambas partes.

2. Ofrecer Consejo

Existen tres razones principales por las que los terapeutas evitan dar consejos directos a sus clientes:

  • Ética: Los terapeutas no deben presumir saber qué es lo mejor para sus clientes.
  • Dependencia: Dar consejos puede fomentar la dependencia del cliente hacia la sabiduría del terapeuta, en lugar de promover el pensamiento independiente y la responsabilidad del cliente.
  • Eficacia: Los consejos directos a menudo no son efectivos a largo plazo.

¿Cuándo pueden dar consejo los terapeutas?

Los terapeutas pueden ofrecer sugerencias cuando cliente y terapeuta han acordado un curso de acción y el cliente está dispuesto a aceptar dichas sugerencias.

3. Ampliar la Visión del Mundo del Cliente

Los clientes que acuden a terapia a menudo se sienten paralizados y no saben cómo solucionar sus problemas. Las soluciones que han intentado no son efectivas. Es importante ayudar a los clientes a mirar sus problemas desde una nueva perspectiva y a ser conscientes de respuestas de afrontamiento que no han considerado.

Los clientes aprenden a atribuir nuevos significados a los sucesos que causan sus problemas. Las creencias de las personas influyen sobre sus interpretaciones acerca del significado del comportamiento de los demás, así como en las predicciones que hacen sobre el efecto de sus acciones. Las creencias están relacionadas con la capacidad de afrontamiento, los estados emocionales y el sentimiento de bienestar del individuo.

El objetivo de la terapia es ayudar a los clientes a sentirse mejor capacitados para realizar las modificaciones adecuadas en su sistema de creencias. Para los clientes, es difícil modificar estas creencias por sí solos, debido a los pensamientos y sentimientos que han generado reacciones predecibles en otros, reforzando así sus creencias.

Las personas construyen un esquema del Yo para definir su valía personal y sus posibilidades de alcanzar lo que desean en la vida. También construyen un esquema interpersonal o un modelo de rol-relacional, que dicta su forma de relacionarse con los demás.

Ejemplos de Esquemas Interpersonales:

  • Tomar actitudes precavidas hacia los otros debido a la necesidad de ser completamente competente y no cometer errores.
  • Ser pasivo y conciliador por el temor a sentirse devastado si no recibe una aprobación constante por parte de los otros.

Los problemas ocurren cuando los esquemas de las personas son rígidos y les impiden adaptarse con flexibilidad.

La meta de la terapia es permitir a los clientes experimentar sus esquemas durante la sesión de terapia, con el fin de decidir si estos esquemas responden mejor o no a sus intereses y experimentar estilos alternativos de percibirse a uno mismo y de interactuar con otros.

Es importante explicar la visión del mundo de los clientes mediante la definición de las diferencias existentes entre la realidad de primer orden (el mundo objetivo) y la realidad de segundo orden (las percepciones subjetivas del mundo).

Ampliar la visión del mundo de un cliente implica considerar el valor de enseñar a los pacientes a ser flexibles. La flexibilidad funcional tiene dos aspectos importantes para el ajuste personal:

  1. Tener un amplio abanico de respuestas de afrontamiento en el repertorio personal. Ejemplo: Conocer diversas formas de responder a una persona que intenta aprovecharse.
  2. Ser capaz de acoplar la respuesta adecuada a la situación. Es decir, saber elegir la respuesta de afrontamiento disponible para una determinada situación.

4. Ayudar a los Clientes a Recapitular Conflictos Genéricos

Una de las contribuciones de Freud a la psicoterapia fue su reconocimiento de la tendencia de los clientes a transferir conflictos no resueltos en la infancia al terapeuta, fenómeno conocido como transferencia. Al revivir el pasado reprimido a través del proceso de la neurosis de transferencia, se pensaba que se proporcionaba al cliente una oportunidad de superar defensas y resistencias neuróticas.

El concepto de transferencia se ha ampliado para incluir la transferencia de sentimientos y pautas de actuación no solo provenientes de conflictos infantiles con los padres, sino también con otras personas significativas en el curso de la vida. La tarea del terapeuta es evitar responder a los clientes de una manera predictiva. En lugar de reforzar la dependencia, la tarea es ayudar al cliente a comportarse de manera independiente, enseñándole a reconocer sus propias competencias.

Freud usó el término contratransferencia para describir las reacciones subjetivas del terapeuta hacia el cliente. Él creía que la contratransferencia era un impedimento a la terapia que los terapeutas debían superar y evitar. Otro autor describió las etapas del proceso en el que los clientes recapitulan sus conflictos con el terapeuta:

  1. El terapeuta es consciente de sus sentimientos respecto al cliente y de sus reacciones ante los comportamientos de éste.
  2. El terapeuta intenta comprender el significado de los comportamientos del cliente y cómo estos significados pueden ser entendidos dentro del contexto de las experiencias vitales de éste y sus relaciones con otras personas significativas.
  3. El terapeuta evita jugar un rol complementario en los dilemas vitales del cliente.
  4. El terapeuta ayuda al cliente a ganar insight sobre los efectos de su comportamiento en el terapeuta.

Al seguir estos pasos, el paciente está obligado a alterar sus comportamientos interpersonales y, por consiguiente, recibe una experiencia correctiva.