Política Social: Evolución, Desafíos y Modelos de Bienestar
Concepto de Política Social
La política social se encarga de solucionar los problemas sociales. Es el conjunto de actuaciones y medidas que adoptan los gobernantes para dar solución a los problemas y a los conflictos sociales. Es una forma de intervención del Estado en la sociedad civil que repercute en el bienestar de las personas, unas veces cambiando sus condiciones de vida, otras veces manteniendo unas condiciones de vida con el fin de mejorar el bienestar de las personas cubriendo sus necesidades materiales como educación, salud, empleo, vivienda y protección social en general.
Dentro de los planes de política social encontramos actuaciones muy diversas, por ejemplo: construcción de hospitales, escuelas, planes de vivienda, planes de becas, ayudas a familias numerosas, ayudas a personas discapacitadas, ayudas a la dependencia, medidas para fomentar el empleo, protección por desempleo, pensiones, etc. Se puede definir la política social como aquella política relativa a la administración pública de la asistencia, al desarrollo de servicios y prestación para paliar los problemas sociales.
Marshall define la política social como la política de los gobiernos encaminada a tener un impacto directo en el bienestar de los ciudadanos, proporcionándoles servicios o ingresos, por ejemplo: sanidad, educación, pensión de jubilación, etc. La política social abarcaría el conjunto de directrices, orientaciones y actuaciones que se realizan para elevar el bienestar social procurando que los beneficios del desarrollo lleguen a todas las capas de la población independientemente de su origen, su capacidad económica, etc.
Precursores de la Política Social
A lo largo del siglo XIX hubo personas de reconocido prestigio que pusieron de manifiesto la necesidad de que el Estado interviniera para resolver los conflictos sociales. Criticaban la posición pasiva, abstencionista del liberalismo caracterizada por el Laissez-faire (dejar hacer-dejar pasar). Esas personas que llamamos precursores son economistas, científicos, sociólogos, políticos, historiadores y fueron muchos, pero solo vamos a destacar cuatro por la influencia que tuvieron sus obras:
- Sismonde de Sismondi
- Louis Blanc
- Lorenz van Stein
- Gustav Schmoller
Del Estado Liberal al Estado Social
El desarrollo de la política social no se logra hasta entrado ya el siglo XX con el paso de los estados liberales a un nuevo modelo de Estado social caracterizado por el intervencionismo estatal en materia social y económica. Las grandes contradicciones que se evidenciaban en los estados liberales requerían soluciones que pusieran fin a los conflictos sociales. Por ejemplo, la ideología liberal exaltaba ante todo la libertad del individuo, pero en su seno surgió una clase social explotada, sometida, que fue el proletariado.
Los valores fundamentales del Estado liberal (igualdad ante la ley, defensa de la propiedad privada, libertad del individuo, libre disposición en el ámbito económico) entraban en contradicción, por ejemplo, con el sufragio censitario. En el ámbito político no todos eran iguales. La libertad en el ámbito económico dio lugar al desarrollo de un capitalismo sin regulación estatal, sin control estatal, que generó explotación y miseria en lugar de bienestar colectivo. Como consecuencia de esas grandes contradicciones se produce el conflicto social, ese enfrentamiento entre burguesía y proletariado.
La clase obrera comienza a reivindicar el sufragio universal, el derecho de asociación y la mejora de su situación socioeconómica. Ante el conflicto social las soluciones fueron de dos tipos: en unos casos mediante procesos revolucionarios y surgieron estados totalitarios, unos fascistas, otros comunitarios, pero todos totalitarios. En otros países, de forma más pacífica, se fueron introduciendo reformas paulatinas en los estados liberales y esa sucesión de reformas culminaron en la creación de los estados democráticos.
El paso de los estados liberales a los estados sociales se consolida tras la Segunda Guerra Mundial. Estos estados comienzan a intervenir en la economía, crean servicios de seguridad social, establecen políticas sociales redistributivas, crean servicios sociales y sistemas de protección para garantizar unas condiciones de vida mínimas a todos los ciudadanos. Ejemplos de ello son la protección al desempleo, enfermedad, vejez, etc. El objetivo de estos estados es lograr el bienestar social y para ello el Estado ha ido asumiendo una función equilibradora en el reparto de la riqueza, de manera que todos los ciudadanos puedan integrarse en la sociedad.
La Privatización de los Servicios Públicos
La globalización de la economía, junto con las dificultades presupuestarias de los Estados de Bienestar (EB), ha propiciado la privatización de determinados sectores. Con ello se pretende, por un lado, la reducción del déficit público de los Estados, vendiendo al sector privado determinadas empresas de titularidad pública, lo que ha supuesto una importante fuente de ingresos (si bien a la larga, supone la pérdida de beneficios futuros que dichas empresas hubieran producido). Por otro lado, el argumento para la privatización ha sido lograr mayor eficiencia económica, al poder reducir los costes de esos servicios, mejorar el rendimiento e incrementar la producción.
La privatización consiste en transferir a la empresa o al sector privado determinadas actividades económicas o sociales que antes eran de responsabilidad estatal. Implica un cambio a manos no gubernamentales de algunas o todas las funciones al producir un bien o servicio que antes era producido públicamente. Privatizar un servicio, sector o empresa no solo es sustituir la propiedad pública por la privada. Significa además que el bien o servicio producido por ese sector o empresa (salvo que se trate de un monopolio) podrá ser ofrecido en un mercado competitivo y los precios se regularán en el mercado.
Si el gobierno delega la prestación del servicio y el cobro de los fondos para financiarlo, ese servicio pasa a regirse por las leyes del mercado. Pero puede haber dificultades para controlar la calidad del servicio. Otra posibilidad es delegar la prestación del servicio, pero que los fondos los controle el Estado. De esta forma, la tutela y la responsabilidad del servicio sigue recayendo en el sector público.
Se dice que el propósito de la privatización es mejorar la eficiencia en la aportación de bienes y servicios públicos. Los efectos de la privatización dependerán del tipo de organizaciones a las que se transfiera la aplicación de la Política Social.
Problemática Actual del Tercer Sector
En la actualidad y como consecuencia de la crisis económica y los recortes presupuestarios, muchas entidades están viendo paralizada su actividad por la falta de subvenciones. Hay servicios que se están dejando de prestar. Al haberse restringido y, en algunos casos, suprimido las subvenciones, existe una mayor dependencia a donaciones de terceros. Algunas ONG que no cobraban por el servicio prestado, ahora están comenzando a cobrar.
El Tercer Sector
El Tercer Sector es el ámbito formado por entidades y organizaciones privadas de carácter voluntario y sin ánimo de lucro, surgidas de la libre iniciativa ciudadana y que funciona de manera autónoma y solidaria, mediante acciones de interés general para impulsar el ejercicio de los derechos sociales, lograr la cohesión y la inclusión social y evitar que determinados colectivos queden excluidos. Su actividad consiste en satisfacer necesidades sociales y para ello cuenta con cofinanciación del sector público.
La Administración contrata o firma convenios con entidades y organizaciones civiles para que realicen tareas que hasta ahora prestaban las administraciones. De esta forma, en los últimos años se ha desarrollado un sistema mixto público-privado en la práctica del trabajo social. Muchos programas sociales son realizados por entidades de la sociedad civil, con financiación pública. El tercer sector es prestador de servicios, cubre carencias que no están cubriendo los Servicios Sociales, denuncia las carencias que hay y reivindica cambios en las políticas sociales, actúa como mediador entre el individuo o colectivos y la Administración.
Hay diferentes tipos de entidades en el tercer sector:
- Las ONG, que aparecen como alternativa de la sociedad civil ante la inoperancia del sector público para llegar a los sectores sociales más desvalidos. Cuentan con importante participación de voluntariado.
- Las Entidades de Iniciativa Social (EIS), que son organizaciones privadas destinadas a cubrir determinadas necesidades sociales.
- Las Entidades no lucrativas caracterizadas por su renuncia al lucro.
- Las entidades altruistas, caracterizadas por la realización de un trabajo altruista.
Todas tienen en común ser organizaciones que realizan servicios públicos desde la sociedad civil. El primer país que comenzó a cofinanciar al tercer sector fue la República Federal Alemana. En los países avanzados se ha ido ampliando la participación voluntaria. La prestación del servicio por el sector no lucrativo es más eficiente (cuesta menos), más humana y eficaz (mejores resultados), aporta mayor innovación, menos burocracia, mayor capacidad para identificar a los realmente necesitados, cuenta con voluntarios gratuitos, con materiales donados, etc.
Todo esto hace que la gestión de servicios o programas sociales por parte de las asociaciones voluntarias presente numerosos aspectos positivos: eficacia en la atención de las demandas sociales, conectan mejor con determinados colectivos como minorías étnicas, drogodependientes o delincuentes, detectan las necesidades sociales y son las primeras en atenderlas, se adaptan más fácilmente a los cambios, abaratan los costes (reciben aportaciones del sector privado y cuentan con voluntariado).
Pero también hay aspectos negativos: trabajan con subvenciones y conciertos temporales, lo que genera incertidumbre respecto a la posibilidad de continuar. Cada vez hay más competencia entre el tercer sector, lo que obliga a incrementar la organización y burocracia de las entidades. Esto les hace perder flexibilidad en la prestación del servicio. Debido a la falta de recursos propios, dependen excesivamente del gobierno.
Voluntariado y Entidades Voluntarias
El voluntariado son personas que realizan un trabajo no remunerado destinado a ayudar a otras personas o a la comunidad. Su principal característica es el altruismo. Se inició con entidades religiosas, que siguen teniendo una fuerte presencia.
En España, el 23% de la población ha hecho o hace voluntariado. Hay unos 4 millones de voluntarios, de los cuales 900.000 se dedican a la acción social. Los ámbitos con más demanda son la infancia y la discapacidad. En último lugar, la exclusión social.
El perfil del voluntario en España ha sido mujer joven, entre 18 y 35 años, que dedica unas 5 horas semanales, pero está surgiendo un voluntariado entre personas mayores de 65 años, que disponen por su edad de más tiempo libre y que quieren contribuir al bien común.
Las entidades voluntarias son organizaciones altruistas, integradas por personas que se asocian para realizar tareas que den respuesta a necesidades no satisfechas ni por el sector público ni por el mercado. No tienen ánimo de lucro, pero los profesionales que trabajan en ellas si perciben remuneración. Están integradas por profesionales y voluntarios. Los responsables suelen tener un vínculo profesional con la entidad y coordinan el trabajo de los voluntarios.
Las Ideologías y las Políticas Sociales
Los Principios de Igualdad y Libertad
Igualdad y libertad son los dos principios que impregnan los distintos posicionamientos ideológicos. La derecha ha hecho suya la libertad, mientras que la izquierda ha hecho suya la igualdad. La igualdad requiere intervencionismo del Estado, mientras la libertad está a favor del no intervencionismo estatal y defiende el libre mercado. Por otra parte, la libertad se vincula con el individuo mientras que la igualdad se vincula con la sociedad.
Ideología Conservadora
Se opone a cualquier tipo de cambio y modificación de lo que constituye una tradición. Pretende conservar lo que existe. No cambiar nada. Ligada a la tradición y a la religión. Sus valores son el individualismo y la libertad. El complemento a la libertad es el individualismo. La sociedad avanza gracias a las acciones de individuos. Considera que el individuo se basta a sí mismo, por lo tanto, no resulta necesaria la mediación de otros grupos sociales, ni del Estado.
Para esta ideología, la igualdad es un valor que jerárquicamente se encuentra por debajo de la libertad. La igualdad implica la imposición de unos ideales, de un modelo económico y social a los demás individuos. Apuestan por una economía de mercado, la cual necesita libertad para su funcionamiento y eficiencia. Es donde mejor se puede medir el esfuerzo individual, la competitividad, la valía de los individuos. El liberalismo y la competitividad hacen brotar la riqueza, castigan al perezoso y premian el éxito. La libre oferta y demanda del mercado permite seleccionar a los más aptos.
Consideran que el gobierno no tiene que regular las relaciones económicas y sociales. Los planes intervencionistas de un gobierno para corregir desigualdades (subiendo los impuestos), generan injusticia social. Al subir los impuestos, se reduce la libertad de las personas para administrar su economía, para invertir y para crear empleo. El gobierno no está legitimado para planificar el bienestar.
Ideología Liberal
Se asienta en los valores de libertad, individualismo y competitividad privada. Considera que el gobierno debe intervenir en determinados momentos en la economía, pero rechazan las políticas igualitaristas. No creen que el mercado pueda autorregularse por sí mismo, pero consideran que el sistema capitalista es el mejor sistema económico descubierto hasta la fecha, si bien controlado por el Estado.
Se decantan antes por la libertad que por la igualdad. Los liberales consideran que un sistema impositivo puede aumentar la distribución de la renta, la cual aumentará la demanda y ésta, a su vez, generará más empleo. La función de un sistema económico y social es reducir la tensión social. Para democratizar el sistema económico, es preciso subordinar el poder económico al poder político. El Estado debe intervenir allí donde el mercado resulta incompetente e ineficaz.
Aceptan el Estado de Bienestar (EB) porque las familias, los individuos o el mercado por sí solos no pueden eliminar la pobreza. Toda persona debe tener unos mínimos y si el mercado no se los proporciona, el Estado deberá proponer un sistema nacional de salud, una política de pleno empleo y una cobertura de prestaciones familiares. Consideran fundamental el apoyo de las organizaciones voluntarias. Se precisa un sistema mixto entre intervención privada, intervención pública y organizaciones sociales.
Ideología Socialdemócrata
Pretende equilibrar los valores de igualdad y libertad. Apoya totalmente los sistemas de bienestar. Apuesta por la igualdad, la libertad y la solidaridad. Pretende encontrar un método político, social y económico que nos haga a todos más iguales sin restringir las libertades. La igualdad incluye la participación ciudadana en las instituciones y los órganos de decisión. Trata de encontrar un equilibrio que posibilite la eficiencia económica y la integración de los grupos con menos posibilidades de origen.
Sus programas políticos contemplan el intervencionismo estatal para modificar la demanda, dando respuesta a la necesidad. Apuestan por la igualdad sociológica. Existen unos derechos naturales que quiebran con la desigualdad. El Estado debe garantizar esos derechos. Para ello, es fundamental el sistema educativo. La educación ha de ser pública y estar financiada por el sistema impositivo. Otros valores son el altruismo, la solidaridad y la cooperación, la competitividad y el individualismo.
Ideología Marxista
Considera que el sistema de producción es lo que moldea lo social, lo político y lo espiritual de una sociedad. Este determinismo económico implica un continuo conflicto entre clases antagónicas. Para acabar con dicho conflicto, es preciso eliminar la propiedad privada de los medios de producción. El sistema capitalista tan solo tiene como objetivo beneficiar y consolidar a una élite.
El poder económico ha de estar subordinado al poder político. Esto ha creado diferencias entre los marxistas. Los marxistas ortodoxos consideran que el Estado es un instrumento al servicio del capital y la clase dominante. Los neomarxistas consideran que el Estado puede realizar políticas con el objetivo de beneficiar a la clase trabajadora. Para éstos, el EB sigue siendo un tipo de Estado que asegura y mantiene la propiedad privada.
Descarta un sistema de servicios sociales privado y sometido a los arbitrios del mercado. Propone el universalismo y la gratuidad de las prestaciones y servicios, la participación de usuarios, asociaciones y profesionales en la toma de decisiones de las políticas locales y la apuesta por programas preventivos. El papel de un gobierno consiste en asegurar que todos los ciudadanos tengan cubiertas una serie de necesidades a través de estos sistemas.
Comparación de las Diferentes Ideologías
Valores:
- Conservadora (C): Individualismo y libertad
- Liberal (L): Individualismo, libertad y competitividad
- Socialdemócrata (S): Libertad e igualdad en equilibrio, solidaridad, cooperación
- Marxista (M): Igualdad, acción colectiva, universalismo y gratuidad de prestaciones y servicios
Plano Económico:
- C: Economía de mercado sin intervención estatal
- L: Libertad de mercado, intervencionismo estatal limitado, residual
- S: Intervencionismo estatal en apoyo de los sistemas de bienestar
- M: Intervencionismo estatal mediante políticas que beneficien a la clase trabajadora
Bienestar Social:
- C: No es responsabilidad estatal. Cada cual a través del mercado
- L: Intervención estatal limitada, residual
- S: Intervención estatal plena. Derechos de los ciudadanos
- M: Intervención estatal imprescindible
Políticas Sociales:
- C: Caritativas y mínimas
- L: De carácter residual
- S: Igualitarias y universales
- M: Universales y gratuitas
El Informe Social de Beveridge
Economista y político de influencia, durante la Segunda Guerra Mundial inició un proceso de reconstrucción y le encargaron a Beveridge que coordinara una comisión encargada de revisar los programas de protección social. El informe social de Beveridge es un informe en el que se propone un sistema universal de lucha contra la pobreza, capaz de proteger a toda la población frente a cualquier caso de contingencias, incluyendo la posibilidad de percibir unos ingresos mínimos.
El planteamiento de Beveridge era que el ciudadano estuviera protegido a lo largo de toda su vida, “desde la cuna hasta la tumba”. El programa incluía varias cosas importantes:
- Un sistema de seguridad social unitario para toda la población
- Creación de un servicio nacional de salud que proporcionase atención médica gratuita con cobertura universal
- Sistema de asistencia nacional que garantizase una subsistencia mínima mediante prestaciones familiares
- Establecer el pleno empleo como objetivo principal y como política de estado
- Extender los beneficios sociales a campos como la educación, la vivienda, la atención especializada a los niños y servicios sociales asistenciales
La Teoría Económica de Keynes
Economista inglés, coetáneo en el tiempo con Beveridge y también formando parte de la comisión que elaboró el informe social. La teoría económica de Keynes propugna el intervencionismo del Estado en la economía mediante inversiones y mediante programas y políticas sociales que mejoren la capacidad de compra de los ciudadanos. Considera que las crisis económicas se producen debido a que la demanda de productos es escasa porque los ciudadanos no tienen capacidad para comprar. Para que la clase trabajadora pueda consumir hay que incrementar sus rentas y eso puede conseguirse si el Estado proporciona gratuitamente una serie de servicios necesarios.
Estas ideas fueron seguidas por gobiernos socialdemócratas para dinamizar la economía e incrementar el bienestar de la población.
El Concepto de Ciudadanía de Marshall
La teoría de Marshall sobre la ciudadanía establece las tres dimensiones para ser ciudadano de pleno derecho: civil, política y social.
Modelos de Bienestar
Modelo Anglosajón o Liberal
Países: Inglaterra, Irlanda, EEUU, Canadá y Australia.
Características:
- Alta confianza en el mercado
- Asistencia social como último recurso
- Dispersión de la renta
- Muchos empleos con bajos salarios
- Dualismo social
- Poco gasto social en proporción al PIB
- Poco gasto en políticas sociales, incluidas pensiones
- Escasa calidad de los servicios sociales públicos
- Acceso a los subsidios condicionado por la empleabilidad
- Importantes gastos en políticas activas de empleo. Sostenibilidad financiera a largo plazo
- Menos poder decisorio de los sindicatos
- Eficiencia en la reducción de la pobreza y promover incentivos para trabajar
Modelo Mediterráneo o Sureño
Países: España, Italia, Grecia y Portugal.
Características:
- Desarrollo tardío del estado de bienestar
- Medidas de protección del trabajo como en el continental
- Seguridad social basada en contribuciones
- Elevados gastos en pensiones
- Servicios sociales como sanidad y educación más similares al modelo socialdemócrata
- Universalismo
- Financiación por impuestos
- Provisión Pública
- Sobreprotección del mercado laboral interno
- Mayor protección a los jubilados que a los trabajadores en activo
- Relevancia de las organizaciones sindicales y patronales
Características sociales:
- Envejecimiento de la población y tasa de desempleo
- Aumento del desempleo
- Incremento hogares unipersonales y familias monoparentales
- Incorporación de la mujer al mercado laboral
Modelo Nórdico o Socialdemócrata
Países: Suecia, Noruega, Finlandia, Islandia y Dinamarca.
Características:
- Universalismo, derecho de ciudadanía
- Financiación por impuestos
- Provisión pública de transferencias y servicios
- Provisión de alta calidad
- Orientación al pleno empleo
- Elevado número de empleos públicos
- Sindicatos fuertes
- Igualdad de género
Modelo Continental o Bismarckiano
Países: Alemania, Austria, Francia y Bélgica.
Características:
- Principio de subsidiariedad
- Estratificación social
- Protección social organizada mediante seguro social en función de la contribución realizada (Base del modelo)
- Elevados gastos en pensiones y subsidios por invalidez
- Subsidios no condicionados a empleabilidad
- Alto poder de los sindicatos
- Favorecimiento de la familia tradicional
La Crisis del Estado de Bienestar y sus Causas
Los estados de bienestar disfrutaron de gran auge hasta la década de los 70 como consecuencia de la crisis del petróleo que se produce a partir de 1973 con motivo de la guerra de Yom Kipur (enfrentó a Israel con Siria y Egipto). La reacción de los países árabes fue reducir el suministro de petróleo a Occidente y encarecer los precios. Se inicia un periodo de recesión económica, inflación y paro por desempleo generalizado. Todo esto hizo que el PIB de los países fuese menor y produce unos desequilibrios en los presupuestos de los estados.
El modelo Keynesiano entra en crisis ante la dificultad estatal de contener la inflación y reducir el desempleo. Todo esto unido a la incidencia negativa que ha tenido la globalización en los estados de bienestar. Sin embargo, los sectores productivos rentables se han ido privatizando, por ejemplo, el sector energético, comunicaciones, etc.