Palabras derivadas de la palabra conejo

Numeración y aritmética  

Las cantidades pueden ser continuas o discretas: • Continua:
La que consta de unidades o partes que no están separadas unas de otras, como la longitud de una línea, el área de una superficie, el volumen de un sólido, la cabida de un vaso, etc. Ej.: agua, azúcar… • Discreta:
La que consta de unidades o partes separadas unas de otras, como los árboles de un monte, los soldados de un ejército, los granos de una espiga, etc. Ej.: lápices, mesas… 
Denominación del número, que variará en función del lugar donde estemos debido al idioma. Ej.: five, cinco… 2.

Representación del número

Cómo se representa, de forma que no sea verbal.

Concepción abstracta del número

Representación mental de la cantidad.
El conteo es un medio que va a permitir saber cuál es el cardinal y la posición de un número (ordinal) con respecto a los demás números que componen la serie. Antes de llegar a la noción de número natural, el niño utiliza términos no numéricos a través de los cuales designa cantidad, pero sin especificarla: • Términos que hacen referencia a la evaluación de la cantidad de forma poco precisa (muchos, pocos, algunos…). • Aspectos prenuméricos que hacen referencia a la comparación de cantidades (más que, menos que, tantos como…).

Nivel cuerda

El alumno es capaz de recitar la sucesión numérica por evocación. El sonido de lo que está diciendo trae encadenados los sonidos siguientes, pero el niño no separa una palabra de otra. Este conocimiento verbal no puede aplicarse al recuento al no distinguir donde acaba una palabra y empieza la otra.

– Nivel cadena irrompible

El niño sólo es capaz de recitar la sucesión numérica si empieza por el uno, pero ahora ya diferencia las distintas palabras numéricas. En este nivel ya se pueden asumir tareas de recuento.

Nivel cadena rompible

Aquí el alumno es capaz de “romper” la cadena comenzando a recitar a partir de un número distinto del uno.

Nivel cadena numerable

El niño es capaz, comenzando desde cualquier número, de contar un número determinado de palabras, deteniéndose en la que corresponda. Por ejemplo, contar cinco números a partir del ocho y decir el número final, el trece. Desde este dominio se afrontan con bastantes garantías la realización de las operaciones básicas del cálculo.

Nivel cadena bidireccional

Es el máximo dominio al que se puede llegar. Supone las destrezas del nivel anterior aplicadas al recitado de la sucesión numérica hacia delante o hacia atrás. Contar bien desde el número x, determinados números hacia atrás, tardando aproximadamente el mismo tiempo que hacia delante, es el tipo de tarea que define al alumno que ha alcanzado este nivel de dominio de la sucesión numérica. 


Percepción temprana de cardinales


Los niños pequeños, entre dos y cuatro años, son capaces de reconocer el cardinal de conjuntos de uno a tres o cuatro elementos sin necesidad de contar. El cardinal es percibido globalmente por simple inspección visual del conjunto. En cambio, cuando se trata de cardinales mayores, los niños ya no saben decirlos correctamente porque eso exige contar y en esta etapa no tienen asumidos los principios en los que se basa dicha técnica. –

Percepción prioritaria de ordinales

Esta etapa corresponde a niños con edades entre tres y cinco años. Ahora los niños ya asumen algunos de los principios que permiten efectuar un recuento. En concreto, el principio del orden estable (las palabras numéricas deben decirse siempre en el mismo orden, empezando por el uno y sin omitir ninguna) y el de la correspondencia uno a uno (cada objeto del conjunto contado debe recibir una palabra numérica y solo una). La práctica del recuento pone de manifiesto el sentido ordinal del número por cuanto la palabra numérica que se adjudica a cada objeto es su ordinal. Sin embargo, en esta fase no se asume el principio de cardinalidad, es decir, los niños no entienden que el último ordinal sea, al mismo tiempo, el cardinal de todo el conjunto. Para ellos, la respuesta a la pregunta, ¿cuántos hay?, consiste en la enumeración de todos los objetos de la colección. –

Percepción prioritaria de cardinales

En esta etapa, los niños, entre cuatro y siete años, asumen el principio de cardinalidad (la última palabra de un recuento indica, no solo el ordinal del último elemento señalado, sino también el cardinal del conjunto) con lo que pueden responder correctamente a la pregunta ¿cuántos hay? Después de haber efectuado un recuento. Pero al centrar su atención en los cardinales sufren una cierta regresión respecto a los ordinales y aparecen, por ejemplo, dificultades al obtener un ordinal.


Blanco  1 Rojo  2 Verde claro  3 Rosa  4  Amarillo  5 Verde oscuro  6 Negro  7 Marrón  8 Azul  9 Naranja  10 

Placas de puntos de Lebert


Utilidades: – Construcción del número. Reconocimiento de los números. – Asociación de la grafía del número con las diferentes placas de puntos. – Trabajar los pares e impares (las placas con picos y las placas sin picos). – Trabajar dobles y mitades. – Juegos de placas por tamaños. – Operar con cantidades: composición y descomposición de números: diferentes formas de construcción de un número. – Operar con cantidades.
El ábaco es un material que permite operar y representar cantidades. Existen diversos tipos de ábaco horizontales y verticales.
El ábaco vertical es bueno para aprender a contar y operar con cantidades. La dificultad es que al no estar estructurado por columnas como en las operaciones, cuando los niños dejen el material les va a costar traspasarlo a la operación.

Utilidades

– Construcción del número. – Clasificación (por colores). – Composición del número (el lugar de la unidad, decena, centena, unidad de millar, decena de millar, centena de millar). – Operar con cantidades: añadir, sustraer, multiplicar y dividir. 

Estrategias aditivas en la resolución de problemasConteo:
Contar con los dedos a partir de 1. Cada número del problema se representa con los dedos. Después el niño cuenta con los dedos, empezando por 1. Para resolver 3+4, el niño cuenta 3 dedos en una mano, después 4 en la otra. A continuación, recuenta todos los dedos empezando por 1. • Conteo: conteo verbal a partir de 1. El niño cuenta mentalmente comenzando por 1. Para hacer 3+4, efectúa mentalmente 1,2,3, después 4,5,6,7. • Conteo: conteo verbal empezando por el primer número. El niño inicializa un contador interno para el primer operador, después incrementa mentalmente el contador en pasos de 1, y así tantas unidades como estén sostenidas en el segundo número. Para resolver 3+3 el niño hace: (3), 4, 5, 6, 7. • Mínimo conteo verbal empezando por el mayor de los números (minimizar el número de pasos a contar). El niño inicializa un contador interno con el mayor de los dos números, después incrementa este contador en pasos de 1, tantas unidades como haya contenidas en el menor de los números. Para resolver 3+4, el niño hace (4) 5, 6, 7. • Descomposición:
Cálculo a partir de los hechos numéricos derivados. Uno de los dos operandos se descompone en dos números, de manera que uno de los dos números de justamente 10 una vez añadido al otro operando. El otro número es añadido entonces a esta suma. Para resolver 8+4, el niño hace: 4=2+2; 8+2=10; 10+2=12. 
 • Recuperación:

recuperación en memoria. El niño recupera directamente la solución almacenada en la memoria. Para hacer 8+4 responde directamente 12. 
 


Estrategias sustractivas en la resolución de problemasContar los objetos:
Cada número del problema se representa por objetos. Los objetos que representan el número que hay que sustraer se quitan. Los objetos que quedan constituyen la respuesta.  Para resolver 4-2, el niño junta 4 objetos y quita 2. Los 2 objetos restantes constituyen la respuesta. • Añadir objetos:
El número sustraído se representa por objetos. Después el niño añade tantos objetos como sea necesario para formar el número del que se sustrae.  Para resolver 4-2, el niño toma 2 objetos, después añade 2 para obtener 4. Los 2 objetos añadidos constituyen la respuesta. 
Emparejar: dos hileras de objetos representando cada una de las cantidades que constituyen los operandos. Los objetos de una hilera se emparejan con los de la otra. Los objetos restantes indican la diferencia.  Para hacer 4-2 se disponen 4 objetos enfrentados a 2 objetos. Los dos objetos no emparejados indican que la diferencia es 2. 
Contar con los dedos:
El niño levanta tantos dedos como indica el número del que hay que quitar, después baja tantos dedos como indica el número que hay que sustraer.        Para hacer 4-2, el niño levanta 4 dedos, después baja 2 y cuenta los dedos que quedan levantados. • Contar a partir del número que hay que sustraer:
El niño cuenta verbalmente en sentido creciente (incremento) a partir del número que va a sustraer. Se para cuando ha alcanzado el número del que hay que restar. La cantidad de números contados indica la diferencia  Para hacer 4-2, el niño cuenta: (2), 3, 4: la respuesta es 2. • Contar hacia atrás a partir del número que hay que sustraer:
el niño cuenta hacia atrás (disminución) a partir del número del que hay que quitar. Se para cuando la disminución es igual al número que hay que sustraer. La cantidad de números contados es la respuesta.  Para hacer 4-2, el niño cuanta: (4), 3, 2 e indica 2 como respuesta. • Recuperación en memoria:
Recupera directamente la solución almacenada en la memoria  Para hacer 4-2, el niño recupera directamente 2 de la memoria. 

Problema 1: Pedro está en el peldaño 3 de la escalera. Sube 6 peldaños más. ¿En qué peldaño se encuentra ahora? Cambio 
Problema 2: Belén tiene 6 caramelos y Mario tiene 3 caramelos. Los dos juntan sus caramelos para dárselos a Pedro. ¿Cuántos caramelos tienen para dárselos a Pedro? Combinación 
Problema 3: Paula tiene 3 pinturas y Esther tiene 6 pinturas más que Paula. ¿Cuántas tiene Esther? Comparación