Modelos de Intervención en Trabajo Social: Enfoques y Estrategias

Modelos de Intervención en Trabajo Social

Enfoque Psicodinámico

Psicodinámico: Modelo de desarrollo de la personalidad basado en la existencia de fuerzas opuestas que buscan obtener un equilibrio dinámico.

Enfoque Funcional

En el enfoque funcional, se alienta a la persona a sobreponerse a sus trastornos y ansiedades por medio de su voluntad. El trabajador social funcional apoya esta función como un «proceso de apoyo».

Enfoque Psicosocial

Busca mejorar las relaciones interpersonales y las situaciones vitales de la persona.

Resolución de Problemas

Centra su atención en el presente.

Formas de Intervención

Trata de intervenir en el estado interno del individuo con el fin de cambiar conductas externas. El TS es capaz de obtener información necesaria, analizar datos significativos y proponer sistemas de acción que se ajusten al caso.

El TS mantiene una distancia personal con el individuo para garantizar que este sea un espejo que refleja lo que el analizado proyecta, evitando propias proyecciones, conflictos y siendo lo necesariamente neutro.

Modificación de la Conducta

Modelo basado en comprender e interpretar el comportamiento externo de las personas. La conducta humana se puede explicar por causas externas que hacen que surjan conductas sociales.

Existen dos estrategias de tratamiento: la primera, modificar las respuestas de la persona ante factores que gobiernan su medio ambiente; y la segunda, tratar de cambiar factores que se encuentran en el ambiente para modificar la conducta problema.

El TS debe obtener, suprimir, disminuir o reforzar conductas.

El objetivo del trabajo social de caso para ayudar a una persona en estado de crisis consiste en conseguir un estado tolerable de confort emocional y que desarrolle capacidades para afrontar la situación de forma efectiva. Se trata de que supere la situación de crisis recuperando los mecanismos habituales de resolver problemas y de enfrentarse a situaciones nuevas. Este modelo no permite una fase de estudio del caso de recogida de datos muy prolongada en el tiempo. Interesa procesar al máximo la situación de crisis y, sobre todo, las energías de que el usuario dispone para superar la situación y adaptarse a sus nuevas circunstancias.

Intervención en Crisis

Se plantea la importancia del «stress» como agente causal, como parte del medio ambiente del individuo. En este sentido, el modelo plantea que en las situaciones de crisis es necesario ir más allá del individuo y de su familia como la principal realidad en la que se relaciona el individuo, haciendo motivo de atención del trabajo social otras circunstancias socio-ambientales que también tienen un significado importante en la vida del individuo. Se clasifican dentro de las terapias breves de la intervención.

El objetivo del trabajo social de caso para ayudar a una persona en estado de crisis consiste en conseguir un estado tolerable de confort emocional y que desarrolle capacidades para afrontar la situación de forma efectiva. Se trata de que supere la situación de crisis recuperando los mecanismos habituales de resolver problemas y de enfrentarse a situaciones nuevas. Este modelo no permite una fase de estudio del caso de recogida de datos muy prolongada en el tiempo. Interesa procesar al máximo la situación de crisis y, sobre todo, las energías de que el usuario dispone para superar la situación y adaptarse a sus nuevas circunstancias.

Modelo Centrado en la Tarea

Trata de resolver los problemas planteados por los clientes y, en consecuencia, lo primero que se plantea es cómo explicar la aparición de los problemas, en qué consisten y cómo hay que tratarlos.

Forma de Intervención

El TS debe tratar de entender la conducta del cliente en lo que refiere a la solución de problemas. El objetivo es preciso, limitado y a corto plazo (nunca más de 12 sesiones o 3 meses). Se inscribe en el marco de referencia del cliente y no en el del TS. Se trata, en primer lugar, de especificar el problema. También importa el contexto social y la reacción de los demás. Debe existir un contrato que determinará las dificultades a resolver, el objetivo a alcanzar y las tareas y el tiempo necesario para llevarlo a cabo, indicando quién, qué, cuándo y dónde se hará.