La Formación en la Empresa

La Formación en la Empresa

2.- El Concepto de Formación

a) La Formación como Capital o Patrimonio

Formación: Aquel conjunto de conocimientos, habilidades, actitudes y competencias, adquiridas por una persona o grupo de personas a lo largo del tiempo.

Precisiones:

  1. Definición muy extensa que englobaría no solo los conocimientos, habilidades, actitudes y competencias que están relacionados con el desempeño profesional, tanto presente como futuro, de la persona o personas que los poseen, sino además a todos aquellos que tienen utilidad exclusivamente en el ámbito profesional o familiar.
  2. G. Becker (1975) en la Teoría del Capital Humano.
  3. Formación General: aquella que es de utilidad en otras empresas además de la que suministra utilidad-productividad.
  4. Formación Específica: aquella que aumenta la productividad en mayor medida en la empresa que la suministra.

b) La Formación como Acción

“Aquella actividad o actividades diseñadas o concebidas por una empresa para suministrar directamente un conjunto de conocimientos, habilidades y competencias, así como en su caso el desarrollo de ciertas actitudes por parte de los participantes en las mismas.”

Precisiones:

  • Definición que puede aplicarse tanto en el terreno de la empresa como en otros ámbitos.
  • En la definición no se identifican quiénes pueden ser los participantes en tales acciones, quién asume su coste. Los destinatarios de las acciones formativas no tienen por qué ser solo trabajadores, también pueden ser para proveedores, clientes, desempleados.
  • Para que pueda haber acción formativa debe producirse la participación.
  • Requisito: que haya sido diseñada con el objetivo de facilitar el aprendizaje además de producir bienes y servicios.

Acciones formativas:

  • Cursos de formación (prácticas, simulaciones, juegos de rol).
  • Formación en el puesto de trabajo.
  • Rotación por diversos puestos de trabajo.
  • Asignación o delegación temporal de funciones y tareas.
  • Participación en conferencias, jornadas, congresos.
  • Material impreso (revistas profesionales, libros…).

c) La Formación como Proceso

“Aquel conjunto de actividades, decididas o realizadas por la empresa, que se emplean para la detección de necesidades formativas, así como para planificar y evaluar aquellas acciones que, dentro de este proceso, se desarrollan para suministrar los conocimientos, habilidades, actitudes y las competencias necesarias para el desempeño actual o futuro de tareas y funciones de carácter profesional, relacionadas con la producción y/o prestación de servicios de la empresa”.

Fases del proceso formativo:

Consideraciones:

  1. Se desarrolla de manera informal.
  2. No se tendrá en cuenta quién realiza en último término las diversas actividades que integran el proceso de formación, que puede ser la propia empresa, empresas especializadas al servicio de aquella, u otros organismos externos. Las competencias del proceso de formación pueden estar repartidas entre los diversos departamentos o unidades organizativas, aunque exista un responsable o unidad dedicado exclusivamente a esta tarea.
  3. Los destinatarios de las acciones formativas que se desarrollen dentro del proceso de formación no tienen por qué estar exclusivamente dirigidos a personas vinculadas laboralmente con la empresa.

3.- La Detección de Necesidades Formativas

Debido al coste de éstas acciones formativas, deben ir basadas en necesidades reales. La información que suministra esta fase sirve para las demás. Sin embargo, con cierta frecuencia la empresa determina las necesidades formativas una vez conocida la oferta disponible de cursos en el mercado: “formación de oferta”.

Consideraciones:

  1. No hay que descartar que en ocasiones la detección de necesidades se use para dar apariencia de legitimidad y solvencia a las acciones formativas que se desarrollen por razones políticas, de imagen.
  2. La detección de necesidades formativas puede llevarse a cabo con grados muy diferentes de formalización.

3.1.- El Concepto de Necesidad Formativa

Existe una necesidad formativa cuando se considera que los trabajadores no poseen los conocimientos, habilidades, actitudes y competencias necesarias para el desempeño adecuado de las tareas y funciones de carácter profesional que tienen asignadas, o vayan a tener asignadas en un futuro. Siempre hay una causa o factor que las origina, ya sea de carácter interno o externo a la empresa; estos factores pueden generar las carencias formativas de dos formas no excluyentes entre sí: afectando a la formación que posee el trabajador (provocando la pérdida o deterioro de la formación que posee el trabajador para el desarrollo de las funciones y tareas asignadas), o bien para trabajar en unas condiciones determinadas, o porque supongan exigir al trabajador unos conocimientos, habilidades, actitudes y competencias que, por las razones que sea, nunca ha tenido.

El reto que tiene que afrontar el responsable de esta fase consiste en usar los mecanismos más adecuados para identificar las carencias formativas. Si esas técnicas se usan para detectar necesidades formativas que ya se han manifestado a través de problemas concretos, entonces estamos ante el “enfoque reactivo de detección de las necesidades”, mientras que si se trata de prever problemas futuros (identificando las carencias formativas que los ocasionan) se estaría ante el “enfoque proactivo”. En la práctica ambos enfoques se mezclan en la fase de detección de necesidades, siendo habitual que algunas de las técnicas que se emplean sirvan para detectar necesidades presentes y futuras.

3.2.- Procedimientos para la Determinación de Necesidades Formativas

-“Método directo de detección de necesidades”: Se determinan directamente cuáles son las carencias formativas de trabajadores o grupos de trabajadores, confiando en la capacidad de análisis de terceras personas para identificar esas carencias; las conclusiones obtenidas deben ser procesadas y analizadas para depurar las carencias formativas identificadas.

-“Método comparativo de detección de necesidades”: Obtiene información relacionada con la formación requerida a los trabajadores y con la formación que los trabajadores tienen; luego se analiza y compara para identificar carencias formativas.