Descubriendo el entorno: Río y espacio urbano en Educación Infantil

Descubrir el río

El presente trabajo trata de la investigación educativa dedicada al descubrimiento del entorno social en educación infantil, que es el objetivo principal de la didáctica de las Ciencias Sociales. Entendemos como entorno social el entorno donde desarrollan su vida los seres humanos. Para ello hemos escogido un entorno social concreto, mi pueblo, Bornos, porque es el más cercano a los alumnos que vamos a tener en educación infantil.

Entendemos por investigación científica la recopilación de información para definir un hecho a través del método científico. Entendemos por investigación educativa la adaptación del conocimiento científico al ámbito educativo, lo cual se denomina trasposición didáctica. De esta manera, este trabajo de investigación se fundamenta en la transposición didáctica.

La investigación educativa la hemos iniciado con el análisis del espacio geográfico, es decir, el soporte físico donde vive el ser humano. Este conocimiento es analizado científicamente por la geografía. Desde esta perspectiva, hemos escogido dos cuestiones fundamentales del ámbito geográfico: la localización a través de Google Maps (representación del contorno) y el río (la importancia del agua). Del río hemos seleccionado el nacimiento, caudal, cauce, afluentes…

En base a esta información que me proporciona la geografía como docente o investigadora educativa, vamos a intentar adaptarla a Educación Infantil, elaborando para ello unos recursos y unas actividades. Uno de los pilares fundamentales en el proceso de enseñanza-aprendizaje en Educación Infantil puede ser el descubrimiento del río. En la psicología actual se ha incorporado la que podemos denominar la experiencia del espacio, con lo que podemos diferenciar entre un espacio objetivo y subjetivo. De esta manera, podemos plantearnos que muchos de nuestros alumnos han “experimentado” el río porque su propia familia se lo ha descubierto. El maestro añadirá a esa experiencia otros objetivos, como la necesidad del agua para vivir. De esta manera, hemos utilizado unos recursos y unas actividades que sirven para descubrir el río.

De esta manera, he realizado una actividad que es la visita al río. En esta actividad iremos todos andando hasta el río; de ahí pasaremos a visitar el embalse de Bornos, donde además de ver todos los animales y plantas, veremos por dónde pasa el río Guadalete, un río del sur de España, que pertenece a la vertiente atlántica de Andalucía, el cual nace al norte de la Sierra de Grazalema y desemboca en el Puerto de Santa María. En esta actividad vamos a pasear en piraguas por las zonas delimitadas que se indiquen; el monitor les irá contando la historia del río y lo importante que es el agua para vivir. Al día siguiente, en clase, seguiremos con la actividad y, en la asamblea, recordaremos todo lo que hemos aprendido realizando esta actividad. He realizado esta actividad para que los niños descubran el río y la importancia del agua. A continuación, realizaremos otra actividad, la cual los niños expondrán algunas adivinanzas y se les motivará para que ellos cuenten algunas y todos ellos intenten darle respuesta. “»¿Quién será la que pasa entre mis ojos, si no soy más que un puente y no la cojo? (agua)»”. Realizo esta actividad para que los niños vean de dónde viene el agua a través de una adivinanza. Para finalizar, haremos una última actividad, la cual vamos a diseñar la silueta de peces de diversos tamaños y detrás de ellos vamos a escribir un tip con la finalidad de la importancia del agua, como por ejemplo: cerrar el agua al cepillarse los dientes, tomar duchas de corto tiempo. Para terminar, le pondremos un imán para que las pongan en sus casas y lo recuerden. Con esta actividad llevamos a cabo la importancia de apagar todos los grupos de casa y ahorrar agua.


Descubrir el espacio urbano

Uno de los puntos a destacar en el análisis del espacio geográfico sería el espacio urbano. Entendemos por espacio urbano: “Es el centro poblacional y el paisaje propio de las ciudades. No existe un significado preciso de espacio urbano. Por lo general, se siguen ciertos criterios numéricos (por ejemplo, el espacio urbano puede ser el área donde viven más de 10.000 habitantes), aunque también es posible que la distinción se realice según criterios funcionales (la mayor parte de la población se dedica a tareas no agrícolas). Puede decirse, por lo tanto, que las características propias del espacio urbano son el elevado número de habitantes con alta densidad poblacional, la presencia de una gran variedad de infraestructuras y el desarrollo de los sectores económicos secundario y terciario.” Pérez Porto, 2011.

Actualmente, el espacio urbano es el espacio más habitual de la población humana, es el verdadero soporte de las sociedades, por lo que nuestro análisis se ha centrado primordialmente en la ciudad. El espacio rural, por el contrario, ha ido perdiendo paulatinamente importancia a la hora de analizar el lugar donde viven nuestros alumnos.

La geografía urbana, “es la parte de la geografía humana que se dedica al estudio de la ciudad en sus aspectos preferentemente espaciales, tanto el espacio edificado como las actividades humanas, o las características socioeconómicas de sus habitantes, haciendo especial hincapié en la forma (morfología), en su funcionalidad y en las transformaciones históricas”, nos ha aportado una serie de recursos e instrumentos a la hora de analizar nuestra sociedad. Entre estos recursos, hemos utilizado la lectura interpretativa del plano urbano, centrándonos en identificar las calles principales, las vías principales, si existe o no existe muralla, cuál es la parte histórica y la expansión urbana.

El espacio urbano que he elegido para este trabajo es mi pueblo, Bornos. La localidad de Bornos está situada en la comarca “Sierra de Cádiz”, en la zona norte de la provincia. El municipio forma parte de la ruta de los pueblos blancos.

Geografía de la percepción

En cuanto al espacio subjetivo, podemos decir que es aquel que construye mi mente a través de las experiencias que tenemos; consiste, sobre todo, en la memorización más o menos consciente de una serie de referencias interrelacionadas. Tiene como coordenadas las sensaciones propias y, a través de este espacio, creamos nuestro mapa mental y la geografía de la percepción. El espacio subjetivo es un espacio vivido y percibido.

Según Lynch (1986), un mapa mental, podemos observar un paisaje urbano imaginable donde se distinguen cinco elementos: hitos o puntos de referencia, sendas o caminos, bordes o límites, distritos o barrios y nodos.

Entendemos que trabajar con esta herramienta no solo nos permite conocer mejor el paisaje urbano de una ciudad, sino que permite el desarrollo de la competencia espacial o geográfica y de la competencia emocional. Rodríguez, 2014.

Este aspecto lo estudia la geografía de la percepción. “Surge hacia 1960 como una tentativa de incorporar los aspectos subjetivos de la geografía”. Fernández y García, 1993. Esta disciplina está influenciada por la psicología porque la construcción de mi espacio está fundamentada en mi mente. El espacio, a través de operaciones mentales, se va a representar en unos mapas que vamos a denominar mapas mentales (ejemplo: mapa que tengo en mi cabeza para llegar a mi casa). Al contrario del espacio subjetivo, existe el plano objetivo, que también se puede representar mediante los llamados mapas topográficos (ejemplo: mapa de América del Sur, Google Maps).

El espacio objetivo es el que obtenemos a partir de la investigación científica y se crean mapas topográficos.

El mapa topográfico es una representación de la superficie terrestre mediante curvas de nivel que tiene como finalidad mostrar las variaciones del relieve de la Tierra. Además de las curvas de nivel, suelen incluirse otras variables geográficas como la vegetación, los suelos, la red hidrográfica, las localidades…, todas ellas con su correspondiente color y símbolo.

El conocimiento del espacio es uno de los aspectos más representativos que los niños de 2º ciclo de Educación Infantil tienen que adquirir entre los 3 y los 6 años.

A la hora de descubrir el entorno urbano en Educación Infantil, vamos a elaborar un itinerario didáctico. Debemos de tener en cuenta que el itinerario es un recurso didáctico que se utiliza en todos los niveles educativos.

El itinerario didáctico “es una herramienta útil para explicar determinados contenidos conceptuales” (Fernández, P.J., 2016), pero este recurso no es nuevo, ya que las salidas escolares fueron introducidas con fines pedagógicos en el siglo XIX por la Institución Libre de Enseñanza.

Según INSA (2002), un itinerario es “un recorrido o camino a seguir con diferentes puntos de parada o de interés en determinados elementos de valor patrimonial o cultural”.

El objetivo general del itinerario es que “se trata de una herramienta que otorga las claves para la comprensión y la enseñanza del espacio geográfico, constituyendo momentos de aprendizaje ricos y profundos que despiertan el interés, al mismo tiempo que enseñan al niño a observar, valorar y reflexionar sobre el medio que le rodea” (García, 1994).

Existen diversos tipos de itinerarios posibles, entre ellos los de carácter urbano, que es en el que se centra este trabajo, en el que planteamos un recorrido por la localidad. Para su diseño, hay que tener en cuenta tres requisitos mínimos a la hora de diseñar una salida de campo en un medio urbano, que no son aplicables a otra tipología de itinerarios: intentar que no haya demasiados puntos de parada y evitar la distancia excesiva entre estos, buscar puntos de interés donde no pase demasiado tráfico ni haya demasiado ruido y, finalmente, desde el lugar que elijamos como parada, que se tenga la más significativa y mayor vista posible del elemento seleccionado (INSA, 2002).

Para trabajar cada uno de los puntos de este itinerario, se plantean una serie de actividades que contribuirán a afianzar los contenidos que se quieren transmitir en cada uno de los puntos de este recorrido.



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Concepto de tiempo: tiempo personal y social

Según desde la perspectiva que tú lo definas, encontramos diferentes tipos de tiempos: física (y dentro de este están los relativo, inicial y final), el tiempo filosofía (Platón, Santo Tomás), teología (salvación…) y meteorología.

El tiempo es una conciencia temporal, que es la experiencia que un individuo tiene del tiempo. Sirve para darse cuenta del proceso del cambio. El ser humano es capaz de reflexionar sobre el tiempo, es decir, sobre el proceso del cambio.

Dentro de la conciencia temporal, encontramos el tiempo personal, que es el que se vive y se experimenta, y consta de tres variables:

  • Tiempo biológico: es la conciencia del cambio en el ámbito físico. (Todo el mundo lo descubre). Cómo descubre que su cuerpo va cambiando.
  • Tiempo biográfico: conjunto de hechos que se van teniendo a lo largo de la vida, que nos permite reflexionar sobre otro proceso de cambio. (Las personas se acuerdan del hecho hasta cierto punto). Hechos fundamentales en los cambios a lo largo de tu vida.
  • Tiempo sociocultural: también denominado contexto, en el que somos producto de la época histórica en la que vivimos. Es conocido como conciencia histórica. (Muy pocas personas tienen conciencia de esto, lo tenemos como fecha, no como contexto, de modo que pocas llegan a él).

Al interpretar el tiempo, es decir, el proceso de cambio, el ser humano lo mide y lo representa, y al realizar esto surgen las nociones o conceptos temporales.

En el ámbito del tiempo personal y las nociones o conceptos temporales se fundamentan en lo que llamamos edad. Es la edad lo que delimita la medida del tiempo y su representación. En principio, la edad define los años que hemos vivido e incluso en la etapa de la vida que se está viviendo. Si estoy viviendo a los veinte años, estoy viviendo en la juventud; si tengo setenta años, estoy viviendo en la vejez. La edad se puede representar en una línea del tiempo.

No es real, ya que cada persona tiene un proceso de cambio diferente, por lo tanto, no es absoluto, sino relativo.

Cada individuo tiene un proceso de cambio relativo. Todas las personas se van dando cuenta no solamente de su cambio biológico, sino que también de su cambio de personalidad, por lo que cada persona va a representar en cada mente su propia línea del tiempo. Al mismo tiempo que construimos espacio, construimos tiempo.

El tiempo social es la experiencia que tiene cada sociedad en su proceso de cambio.

  • Sociedades atemporales: son aquellas que no perciben el proceso de cambio. Por ejemplo, cualquier grupo de animales (manada de elefantes u hormiguero) y sociedades prehistóricas (en el caso de los humanos).
  • Sociedades temporales: son aquellas que van a experimentar procesos de cambios (si perciben el cambio). Lo primero que se preguntan es el origen (¿cuál es el origen de la sociedad?, ¿cómo hemos nacido?, las raíces). Mitos, que es descubrir dónde está el origen; la mayoría tienen connotaciones religiosas, son leyendas, no se pueden demostrar (ejemplo: Hércules). Hechos históricos: nos permiten hablar del origen y del cómo ha ido cambiando la sociedad, se pueden demostrar. Ciencias históricas: cuando se tiene un documento para demostrar lo que ha ocurrido.
  • Tiempo cronológico: no se relacionan los hechos, es colocar los hechos de manera aislada en el tiempo.
  • Tiempo histórico: etapa histórica o periodo histórico: se relacionan las fechas y los hechos. Si se marcan por fechas, son invenciones de los historiadores, pero son falsas, no es real.


El tiempo histórico tiene tres fases:

  • Tiempo inicial: es un hecho inmediato que ha ocurrido, pero que no ha dejado huella en su vida, recuerdos que se pierden.
  • Tiempo coyuntural: es un hecho de tiempo medio. (La coyuntura se ve fácilmente).
  • Tiempo estructural: es un hecho en tiempo final que dura para toda la vida. Ejemplo: tener un hijo. (La estructura es más difícil de ver).

Modelo de vida: las sociedades pueden vivir en la misma fecha, pero tener diferentes modos de vida. No se plantea la sociedad por fecha, sino por modelos, en qué fase están. Cada sociedad tiene un modelo de cambio diferente, por lo tanto, no se puede determinar por fecha.

Sociedades humanas:

  • Cazadores/recolectores, agricultores/ganaderos, industriales, posindustriales.

Se pasa de unas sociedades a otras por diferentes hechos que han ocurrido de uno a otro; ese hecho ha marcado el cambio de la sociedad, que evolucionará, aunque esos hechos tienen fechas. Todas las sociedades no tienen por qué tener el mismo recorrido.

Si ponemos las cuatro fases en función de modelos en lugar de fechas, sí estaremos midiendo bien el tiempo; averiguando en qué fase está esa sociedad, ya que cada sociedad tiene un proceso de cambio diferente.

Uno de los objetivos de la didáctica de las Ciencias Sociales es la concienciación del tiempo de una sociedad, enseñar los procesos de cambio que ha experimentado la sociedad en la que yo vivo. Ese es el objetivo principal de la enseñanza de la historia.

¿Cómo descubro la conciencia del tiempo en Educación Infantil? La historia en sí misma no constituye un área ni siquiera un contenido específico dentro del actual currículo de Educación Infantil. En otros países europeos, sin embargo, sí que se contempla la enseñanza de la historia desde edades tempranas. En España, el actual currículo de Educación Infantil estructura el segundo ciclo en tres áreas (Conocimiento de sí mismo y autonomía personal, Conocimiento del entorno y Lenguajes: comunicación y representación). La enseñanza de la historia podría relacionarse con todas ellas, ya que:

  • a) Contribuye a la construcción gradual de la propia identidad, aspecto relacionado con el área de Conocimiento de sí mismo y autonomía personal.
  • b) Ayuda a interpretar las huellas del pasado en el entorno y, por tanto, al conocimiento del entorno en sí mismo.
  • c) El trabajo con fuentes históricas y la elaboración de producciones propias del alumnado con información histórica implica el trabajo con diferentes formas de comunicación y de representación.

Nos hacemos una pregunta: ¿es posible enseñar historia en E.I.? Creemos que sí y que se pueden trabajar tres aspectos generales: la enseñanza del tiempo, la enseñanza de contenidos históricos y la enseñanza de procedimientos ligados a la investigación histórica. En definitiva, parecen adecuadas las líneas de acción didáctica para la enseñanza de la historia a alumnado de tres a ocho años que propone Cooper (2002):

  • Comprender los conceptos de tiempo y de cambio.
  • Interpretar el pasado.
  • Deducir e inferir información de las fuentes históricas.

Como he dicho anteriormente, en el currículo actual no habla de la enseñanza de la historia, pero incluye aspectos de educación en la temporalidad a través de la medida del tiempo y los ritmos de la vida cotidiana.


Línea del tiempo personal:


El proceso evolutivo de la sociedad que no se puede explicar en Educación Infantil porque ellos solo tienen conciencia del tiempo personal. El tiempo histórico del niño puede ser explicado con el nacimiento de un hermano, que empieza a tomar conciencia del hermano. La primera adquisición que tenemos del tiempo son las nociones temporales, que son las que están relacionadas con las actividades que realizan a diario.


(Línea tiempo subjetiva)

Los niños van aprendiendo el calendario, horas, minutos, el reloj… y con esto les enseñamos a medir el tiempo.

El tiempo social ocurre al mismo tiempo, pero el niño no es consciente de ello.

¿Qué se le explica al niño? → Pasado histórico. En principio, para explicarle, le abrimos el camino del pasado histórico para que pueda comprender el presente. El pasado “normal” no lo comprenden como una relación de causa-efecto porque no tienen conciencia para interpretar los hechos. Es por ello que podemos descubrirle un personaje histórico, hechos históricos, castillo… de este modo, vamos creando en su mente el tiempo histórico, pero nunca pretendemos que tenga causa-efecto. Los niños no pueden concebir lo que es tiempo histórico, pero como docentes sí podemos descubrirle algún hecho histórico.