Desarrollo económico durante el peronismo
Circulación monetaria, pero este no respondía al incremento de la producción. La creciente sobrevaluación del peso en relación con su paridad teórica no pudo resistir la crisis de 1949, y en 1950 se lo devalúa oficialmente. Entre 1949-1950 la política económica implementada con el surgimiento de la crisis reduce notoriamente la financiación. En 1952 las restricciones en materia monetaria se relacionaron con un descenso de la tasa de inflación y una fuerte recesión en el sector productivo, luego el proceso inflacionario se redujo notoriamente durante el periodo de 1954-1955.
Distribución del ingreso
- Una de sus fuentes fue el incremento de los salarios derivado de la generalización del régimen de convenios colectivos de trabajo, el establecimiento de salarios mínimos, la introducción del sueldo anual complementario y la implementación de las vacaciones pagas.
- Sistema de salario indirecto mediante el régimen de jubilaciones y pensiones, y las políticas de educación, salud, vivienda, turismo y recreación.
- El proceso de redistribución abría una fuerte discusión, por cuanto el incremento de los salarios superaba al de la productividad, disminuyendo las tasas de rentabilidad.
Sector industrial
- La industria ocupaba un lugar central en la concepción económica del peronismo. Su crecimiento era tomado como la base sobre la que se podía avanzar en la redistribución del ingreso, en el logro del pleno empleo y en la independencia del abastecimiento interno.
- En la formulación del Primer Plan Quinquenal, los límites se observan con claridad. El programa hacía hincapié en el desarrollo de las industrias livianas, en especial a aquellas vinculadas a la utilización de insumos agropecuarios.
- La característica central del proceso de industrialización durante el peronismo (en especial hasta 1952) fue el desarrollo de la sustitución de importaciones de bienes de consumo no durables, conocida como “sustitución de importaciones fácil”.
- La protección frente a la competencia externa no sólo emanaba de los aranceles aduaneros, sino también del régimen de control de cambios.
- En 1945, la participación del sector industrial en el PBI fue mayor que la del agropecuario, y esa participación continuó creciendo en 1946 y 1947.
- La creación de nuevas industrias requería grandes inversiones y una alta capacidad de generación de tecnología propia hacían impensables, sin un estímulo especial, un camino de desarrollo nacional autocentrado.
- Recién a partir de 1952, comenzaron a vislumbrarse vientos de cambio, que permitieron avanzar sobre algunos del notorio déficit que presentaba el sector industrial, apuntando hacia rubros tales como combustibles, productos químicos, derivados del petróleo y maquinaria y vehículos.
- Con la ley 14.222, se optó por recurrir a la radicación de capitales extranjeros, pese a que esta situación chocaba con el objetivo inicial del gobierno peronista de recuperar los resortes económicos en manos extranjeras.
Plan de reactivación Económica 1952
El plan marcaba una serie de medidas destinadas fundamentalmente al control de la inflación y la reducción del sector externo, y centradas en la restricción del consumo, el fomento del ahorro y el aumento de la productividad. La creación de la Comisión Nacional de Precios y Salarios, fue uno de los organismos desprendidos de este plan. El objetivo de contener la inflación fue alcanzado prontamente, al igual que la disminución de la deuda pública y la recuperación del sector externo. Esto se produjo aun cuando los términos del intercambio continuaron cayendo, significando que hubo un aumento significativo del volumen físico de exportaciones.
Segundo Plan Quinquenal
Proponía mantener el equilibrio de precios y salarios, y estimular el desarrollo económico general. Un programa de inversiones estatales y privadas destinado a resolver las necesidades básicas del país en lo referente a materia primas, energía y transporte, y bienes de capital. Proseguir la política de sustitución de importaciones. Fomentar el incremento de la productividad agrícola-ganadera. Conceder un papel complementario al capital y al crédito extranjero como factores de cooperación y estímulo al desarrollo económico, aumentar la capacidad de importación del país a partir de una decidida política de exportaciones que generara las divisas necesarias. Coordinar la participación de empresarios y trabajadores en la planificación y ejecución de la política económica del país, determinar el papel de la empresa privada frente al intervencionismo estatal, consolidar el cooperativismo y frenar la intermediación artificial en las actividades primarias. Los objetivos del Plan fueron los aumentos de las exportaciones, para lo cual se proporcionó a los exportadores un tipo de cambio más satisfactorio y se aumentó el número de productos que se podían negociar en el mercado libre. En el agro, en particular, el sector más castigado por la anterior política, se trató de estimular el aumento de la producción a través de la modificación de la aplicación del impuesto a los réditos. La ganadería resultaba especialmente estimulada a fin de incrementar las áreas destinadas a esta actividad compensando así la reducción del área sembrada con cereales.