Conceptos Clave de Economía: Bienes Públicos, Déficit y Fiscalidad
Bienes Públicos
Un bien público puro es aquel cuyo consumo es no rival y no excluible. Un bien es no excluible cuando no puede impedirse el consumo del bien a ningún individuo a un coste razonable. Es decir, cuando no existe ninguna restricción que garantice que sólo los individuos que paguen por él puedan consumir el bien. Como los individuos pueden consumir el bien, aunque no paguen por él, se incentiva el comportamiento del usuario gratuito, también conocido como Free rider, y se produce una subproducción.
El consumo de un bien es no rival cuando el hecho de que un individuo consuma el bien no afecta a la posibilidad de que otros individuos lo consuman, ni a la utilidad que deriva dicho consumo. La no rivalidad permite el consumo simultáneo del bien por varios individuos.
Determinación Óptima de un Bien Público
Para determinar el nivel de provisión óptimo de un bien público puro, la demanda agregada debe construirse sobre la base de su característica de consumo no rival. Dado que permite el consumo simultáneo, una vez que se provea una determinada cantidad del bien (q), todos los individuos consumirán la misma cantidad. La disposición a pagar por parte de la sociedad será igual a la suma de la disposición a pagar de cada individuo. Esta condición se conoce como la Regla de Samuelson.
Superávit/Déficit No Financiero y Superávit/Déficit Primario
El superávit/déficit no financiero es la diferencia entre la suma de los ingresos no financieros (capítulos 1-7 de la clasificación económica del presupuesto de ingresos) y la suma de los gastos no financieros (capítulos 1-7 de la clasificación económica del presupuesto de gasto).
Por el contrario, el superávit/déficit primario es la diferencia entre la suma de los ingresos no financieros (capítulos 1-7 de la clasificación económica del presupuesto de ingresos) y la suma de los capítulos 1, 2, 4, 5, 6 y 7 de la clasificación económica del presupuesto de gasto.
Diferencias entre los Dos Saldos Presupuestarios
La diferencia entre ambos saldos radica en que el superávit/déficit primario no tiene en cuenta el capítulo 3 de la clasificación económica del presupuesto de gasto. Por tanto, es una definición de déficit que excluye los gastos financieros, como los intereses de la deuda. El superávit/déficit primario es, por tanto, una definición de déficit que intenta no tener en cuenta gastos que se comprometieron en ejercicios pasados.
Rentas Irregulares e Imposición sobre la Renta Personal
Rentas Irregulares
El período impositivo en el impuesto sobre la renta es de un año. Por eso encontramos la naturaleza irregular: rentas generadas en un período superior al período impositivo y no repetidas en el tiempo. En España, el período de generación es superior a 2 años. La acumulación de rentas en un momento del tiempo, combinada con la progresividad del impuesto, genera una tributación excesiva de estas rentas.
La solución que se adapta en España es el sistema de reducción del 30%. Deducciones al 30%, porque en edad de jubilación hay mucha gente, por tanto, el porcentaje es mayor.
Imposición sobre la Renta Personal: Elementos Internacionales
Se refiere a las personas que viven en distintos países en el mismo año. Existe una mayor movilidad de personas y capitales. Principios:
- Residencia: se paga por la renta mundial en el país donde se reside.
- Territorialidad: se paga en el territorio donde se obtienen las rentas y sólo por las rentas generadas en ese país.
Doble Imposición Internacional (Doble Tributación): solo si estamos en un período de un año. Mecanismos de correlación: crédito fiscal, exención. El mínimo en España es de 60.100 euros.
Maximización del Ahorro Fiscal y Endeudamiento Excesivo
Maximizar el Ahorro Fiscal
La afirmación de que para maximizar el ahorro fiscal se necesitan periodos cortos y lo más grandes posibles es falsa. La estrategia óptima depende de la legislación fiscal específica y de las circunstancias individuales.
Posibles Causas del Endeudamiento Excesivo
Cuando una empresa se financia con capital propio o fondos propios, el coste de oportunidad no es deducible. En cambio, cuando se financia con recursos ajenos, como préstamos, se pueden deducir más conceptos, ya que el coste de oportunidad de la depreciación fiscal será siempre distinto de cero. Esto puede llevar a un mayor nivel de deducciones, un menor impuesto a pagar y, en consecuencia, un incentivo a la inversión. Sin embargo, también puede incentivar un endeudamiento excesivo si las empresas priorizan la deducción fiscal sobre la salud financiera a largo plazo.