Entendiendo el Modelo Biopsicosocial: Un Enfoque Integral de la Salud
El Modelo Biopsicosocial: Un Enfoque Integral de la Salud
CLASE: MODELO BIOPSICOSOCIAL
El modelo biomédico presenta insuficientes resultados en salud en determinados problemas (adicción a tóxicos, conductas de riesgo, adhesión al tratamiento, pacientes funcionales, enfermedades psicosomáticas, síntomas indefinidos, etc.) y en la satisfacción de las personas con los servicios de salud. Estas inexplicables incongruencias encuentran respuesta en el modelo biopsicosocial. En 1977, Engel, a través de la Teoría General de Sistemas, plantea que en la persona interactúan el contexto social en que vive el paciente, sus características psicológicas y biológicas.
*Física: Físico, biológico, bioquímico y sintomatológico.
*Psicológica: Cognoscitivo, emocional y afectivo: miedo, ansiedad, incomunicación, autoestima, incertidumbres vitales, etc.
*Social: Relaciones familiares, interpersonales, laborales.
El modelo biopsicosocial tiene sus inicios con el cambio de paradigma científico general que se inició en el siglo XX con la teoría general de la relatividad y el principio de incertidumbre de la física cuántica. Las bases del modelo en esta nueva forma de entender la realidad del ser humano no se contradice con la biomédica, sino que la completa, igual que ha sucedido en el resto de las ciencias.
*Principios de incertidumbre
Es imposible que el observador sea completamente objetivo; de alguna manera, siempre forma parte de lo observado.
El conjunto formado por observador, instrumento de medida y suceso observado tiene una identidad que hace difícil separar el observador de lo observado.
La causalidad en ciencias es siempre múltiple, compleja y no lineal. En su análisis, las conclusiones obtenidas no se ajustan completamente a la realidad.
El inicio de un fenómeno natural y su desarrollo posterior es impreciso; el pronóstico de lo que va a suceder se guía por el principio de incertidumbre.
Aunque se fragmente un fenómeno natural para estudiarle mejor, su realidad sigue siendo global y no se encuentra fragmentada.
El contexto donde se producen los fenómenos forma parte de los mismos; es difícil extrapolar experiencias y ser imparcial.
El médico debería utilizar en su trabajo diario lo mejor de ambos modelos con sus pacientes. Con el modelo biomédico, permite la correcta atención de múltiples problemas de salud de base biológica de las personas asignadas en su consulta, y con el modelo biopsicosocial realiza una atención a la salud de la persona y su familia de manera global.
*Las principales aportaciones del modelo biopsicosocial a la medicina se concretan en varias consideraciones:
La salud y la enfermedad son un *continuum* y forman parte de un mismo proceso. En una persona concreta, los límites entre salud y enfermedad son borrosos.
El proceso salud-enfermedad es multidimensional; los factores biológicos, psicológicos, sociales, familiares, medioambientales y culturales interactúan, positiva o negativamente, de manera continua.
La función del médico es ayudar a sus pacientes en todas las fases del proceso, promocionando la salud, previniendo la enfermedad, curando o aliviando los síntomas, recuperando o rehabilitando funciones y acompañando en las fases finales de la vida. La organización y el desarrollo de la atención médica deben centrarse en las necesidades del paciente, prioritario en la relación.
El médico debe ser un gran comunicador y tener habilidades para establecer una buena relación personal con sus pacientes. El médico, en el abordaje de los problemas de salud de sus pacientes, debe considerar que este forma con su familia y la sociedad un gran sistema que interactúa continuamente.
El médico incorpora al paciente en su sistema modelo de atención clínica, considerando sus conocimientos, creencias y expectativas en sus procesos de salud y enfermedad.
Modelo Biomédico
La medicina científica académica se basa en el modelo biomédico. Este se centra en el estudio y tratamiento de las enfermedades, considerando a estas como entidades propias independientes de los pacientes. Considera al cuerpo humano como una estructura anatómica con aspectos morfológicos y funcionales bien definidos, a la enfermedad como una lesión morfológica y/o funcional, y al médico como el profesional técnico que lo repara. Por tanto, su objetivo es curar la enfermedad con un preciso diagnóstico e indicando un tratamiento correcto según la Medicina Basada en la Evidencia, y de una manera eficaz y eficiente. Considera que los problemas de salud, incluidos los de salud mental, se deben a trastornos en mecanismos físico-químicos, y pueden explicarse si se descubre su base molecular, genética o por agentes externos físicos o biológicos. Las necesidades de salud de las personas se determinan por sus elementos constitutivos físico-químicos, con poca atención a sus dimensiones psicológica y social. La investigación de las causas de la enfermedad y de los procedimientos terapéuticos se concentra en las «evidencias o pruebas materiales», olvidando la compleja realidad del ser humano.
–Curativo: su objetivo principal es curar enfermedades y evitar la muerte; tiene dificultades para afrontar las patologías crónicas y los estadios finales de la vida.
–Objetivo: solo considera lo que se puede medir con alguna técnica; necesita una *vara* de normalidad para tener un referente sobre el que actuar; tiene dificultades para entender las dimensiones psicosociales de la persona y mantiene una cierta distancia con el paciente por la carga de subjetividad que puede forzarle a asumir.
–Biológico: su objeto de atención es el cuerpo humano y sobre esta base establece el diagnóstico y el tratamiento; si no encuentra datos biológicos que confirmen los síntomas del enfermo, el problema se califica de «funcional».