Gestión de Residuos Peligrosos: Impacto y Tratamiento

Residuo Peligroso

Residuo peligroso: desecho que pone en riesgo la salud de personas, seres vivos y el medio ambiente.

Extracción: suelo, terrenos de recubrimiento, estéril; su problemática es el gran volumen generado.
Flotación: ácido sulfúrico (Cu), cianuro sódico (Au).
Fundición: residuos escorias vítreas, polvos de humos y lodos o barros.
Refino Electrolito: residuo lodo electrolito (alto metal noble).

Aguas ácidas por oxidación de piritas, sulfuros como calcopirita, bornita, molibdenita y blenda.

Existen dos direcciones:

1. Minimización y Reaprovechamiento: interés de minimizar relación E/M por costos y poder recuperar mineral; reaprovechamiento de residuos como fabricación de H₂SO₄, vidrios, fertilizantes, etc.
2. Tratamiento y Disposición Final: tratamiento más común en manejo de residuos sólidos es la disposición controlada de estériles en pilas y ocasionalmente nuevamente en la mina (backfilling).

Industriales Peligrosos (RESPEL): objetivo de neutralizar, recuperar energía o material, eliminar o disminuir su peligrosidad (ds. 148).
Tóxicos y Peligrosos: finalidad de recuperar recursos, detoxificación y reducción de volumen.
Tratamiento Físico: separación de fases y solidificación, relaves, secado de barros en lechos, estanques.
Solidificación: convierte el residuo en insoluble y con características de roca dura, con asbesto.
Tratamiento Químico:
- Oxidación: como el CN que se puede tratar por oxidación química con cloro o hipoclorito.
- Precipitación de Metales Pesados: como Cu, níquel o zinc, que pueden ser removidos con cal o soda cáustica.
- Reducción Química: como el ácido crómico, reducido por ej. sales de sulfito, dióxido de sulfuro, sales ferrosas.
- Neutralización: soluciones acuosas de ácidos minerales que provienen de Fe, zinc, Cu, bario, níquel, cromo, cadmio, estaño, plomo y pueden ser neutralizados con cal (alcalino).
- Separación de Aceites y Agua
- Recuperación de Solventes y Combustibles

Ambientales: contaminación del entorno (suelo, aire, agua); exceso de sustancias químicas pone en riesgo la disponibilidad de un recurso (agua) que se vuelve inutilizable e imposible de rehabilitar.
Arsénico: cáncer a la piel, vejiga, hígado y pulmón; patología de pie negro.
Berilio: cáncer a la piel y pulmón.
Cadmio: cancerígeno; produce bronquitis, infertilidad, cáncer de próstata, hipertensión.
Cloruros: cancerígenos; producen tumores hepáticos y sanguíneos, daños al aparato reproductivo.
Cobre: náuseas y vómitos.
Coliformes Fecales: infección gastrointestinal.
Cromo: problemas gastrointestinales, dermatitis, cáncer de pulmón.
CN: letal al ingerir e inhalar.
Sulfatos: de cadmio es cancerígeno; de hidrógeno, irritación ocular.
Dioxinas: sustancias químicas tóxicas más potentes; fuentes emisoras: incineración, producción de pasta y papel, impurezas o subproductos donde interviene el cloro.
Metilato de Mercurio: provoca muerte por paro renal; venenoso, corrosivo para la piel, ojos y membrana mucosa.
Níquel: cancerígeno; asma pulmonar, conjuntivitis.
Plomo: afecta sistema nervioso, producción de células de la sangre, los riñones, sistema reproductivo; puede producir abortos y problemas en el feto.

Legislación: el contaminador paga.

Instrucciones: operación segura y correcta, hojas de datos de seguridad, instrucciones y procedimientos de higiene y seguridad y para emergencias.
Cumplimiento y Fiscalización: ley 19.300, ministerio del medio ambiente y el servicio de evaluación ambiental (SEA) autoriza o no resolución de calificación ambiental (RCA); superintendencia del medio ambiente (SMA) que fiscaliza cumplimiento de RCA con facultad de fijar multas; tribunales ambientales.