Manual de Psicopatología: Guía Completa
Características de la Escuela Americana
- Un conflicto inconsciente específico.
- Una disposición constitucional donde exista una determinada vulnerabilidad del órgano afectado.
- Una situación vital desencadenante (estrés).
Hipertensión esencial, enfermedad de Basedow, úlcera péptida, asma bronquial, colitis ulcerosa, poliartritis crónica y eczema.
Manía
La manía se caracteriza por la alteración del humor básico en su exceso.
Síntomas
Alteraciones Afectivas o Emocionales
- Alegría patológica: inmotivada, intensa y desadaptada.
- Euforia, exaltación y expansividad.
- Labilidad afectiva.
- Irritabilidad.
Alteraciones del Pensamiento
- Pensamiento rápido con fuga de ideas.
- Ideas megalomaníacas que pueden ser delirantes.
- Dificultad de concentración.
Alteraciones de la Conducta
- Verborrea.
- Hiperactividad que puede llegar a la agitación psicomotriz.
- Disminución de la capacidad de autocrítica y de la prudencia que les lleva a realizar gastos excesivos e inapropiados, creer en proyectos inalcanzables y realizar actividades placenteras de alto riesgo.
- Desinhibición y promiscuidad sexual.
Alteraciones Somáticas
- Sueño alterado con disminución de la necesidad de dormir.
- Importante resistencia a la fatiga.
- Aumento de apetito con el consiguiente aumento de peso.
- Alteración del ritmo menstrual (amenorrea).
Mecanismos de Defensa: Represión y Sublimación
Sublimación: El individuo se enfrenta a las amenazas canalizando sentimientos o impulsos potencialmente desadaptativos en comportamientos socialmente aceptables (deportes).
Represión: Se enfrenta expulsando de su consciencia (haciendo inconscientes) sentimientos o deseos que le producen malestar.
Depresión a Corto Plazo
- Evitar autolesiones y suicidio.
- Mejorar autoimagen e higiene.
- Establecer y mantener un adecuado funcionamiento biológico.
- Promover expresión verbal y no verbal de los sentimientos.
- Canalizar la hostilidad de una manera segura.
- Orientar al paciente hacia la realidad.
- Combatir el pesimismo.
- Cumplir y administrar correctamente el tratamiento.
Indicaciones de los Hipnóticos
- Insomnio de conciliación: hipnóticos de vida media corta.
- Insomnio de mantenimiento: hipnóticos de vida media intermedia.
- Insomnio de despertar precoz: hipnóticos de vida media larga.
Parasomnia
Es un trastorno caracterizado por la reducción de la capacidad de dormir como consecuencia de factores psicológicos, biológicos o ambientales. En la parasomnia distinguimos:
Pesadillas
Las pesadillas son episodios de sueño con ansiedad y con una reacción motora que algunas veces provoca el despertar. Se da durante el sueño paradójico en el período medio o final del sueño. Se da con más frecuencia en los primeros años de vida, aunque se puede dar a cualquier edad. Cuando se despierta recuerda haber soñado algo que le hace sentir amenazado; la ansiedad tiende a desaparecer rápidamente.
Terrores Nocturnos
Se produce con un despertar brusco con gritos, ansiedad, sudoración, taquicardia y piloerección, y gestos incoordinados y rápidos. Se produce en la fase III o IV del sueño y aparece en el primer tercio de la noche. El niño no se acuerda del sueño.
Sonambulismo
Se basa en movimientos corporales que pueden llegar a que el individuo se levante de la cama y camine; mantiene los ojos abiertos y fijos, y puede llegar a alimentarse o salir de la casa. Se produce durante el sueño de ondas lentas (fase III y IV) y se da al principio de la noche. Su duración puede ir de unos minutos a media hora. Se da más en niños entre 10 y 14 años.
Parasomnias no Especificadas
Agorafobia
Se caracteriza por un miedo notable a encontrarse en lugares o situaciones de los que pueda ser difícil escapar, o en las que no es fácil obtener ayuda en el caso de que aparezcan repentinamente síntomas que pudieran ser incapacitantes o extremadamente embarazosos. No solo se incluyen espacios abiertos, sino también terror a las multitudes. Constituyen situaciones agorafóbicas características el uso de transportes públicos, teatros, grandes almacenes, etc.
Muchos casos de agorafobia comienzan con crisis de angustia espontáneas. Si estas crisis continúan, suele desarrollarse una ansiedad anticipatoria, caracterizada por un sentimiento de aprensión.
Para hacer frente a la ansiedad que produce esta situación, a menudo el individuo insiste en que algún miembro de la familia o amigo le acompañe siempre que sale de casa.
Fases del Suicidio
- Ideas de muerte: En primer lugar, suele aparecer, precedido de psicopatología, la ideación de muerte, que suele ser de forma un poco obsesiva y parásita.
- Ideas de suicidio: Esta ideación se va transformando en ideas de suicidio; del pensar que se estaría mejor muerto y que esta muerte mejoraría la situación de las personas próximas, se pasa a pensar en cómo morir, aunque no de una forma planificada.
- Planificación del suicidio: Esta planificación se genera en un paso más avanzado, en el que el sujeto piensa en cómo puede llegar a suicidarse y en el método que utilizará. Se distingue en este momento una diferencia clara entre una mala y una buena planificación, es decir, aquella que tiene una ligera maduración en el método, el momento, el sitio y la despedida previstas, y la que presenta una planificación con todos los cabos atados.
- Intento de suicidio: Cuando se produce un intento de suicidio que no se consuma con la muerte debido a que le falló el método, los cálculos realizados o por la intervención prematura de alguien. Debemos tener en cuenta, en este momento, a aquellos sujetos, que suelen ser pocos, que planifican el intento autolítico sin una intencionalidad final de muerte.
- Suicidio: Cuando se consuma la muerte. En este grupo también se debe tener en cuenta a aquellos que no planificaban la muerte, sino un intento autolítico no finalista, pero cuyos cálculos fallaron. Esta progresión es un aspecto fundamental en aquellos casos sospechosos, así como en los intentos autolíticos, puesto que nos aportan una idea del peligro ante un nuevo intento de suicidio.
Esquizofrenia Catatónica
Predomina el trastorno del movimiento o movimientos motores. Los expertos hablan de «estupor catatónico». A pesar de tener la conciencia despierta, el enfermo no reacciona a los intentos de entrar en contacto con él. Su rostro permanece inmóvil e inexpresivo, no se percibe ningún movimiento interior e incluso fuertes estímulos de dolor pueden no provocar reacción alguna. En los casos más graves pueden llegar a no hablar, ni comer, ni beber durante periodos lo suficientemente largos como para que peligre su vida. Sin embargo, en el interior del enfermo puede haber verdaderas tormentas de sentimientos, que a menudo solo se manifiestan en una aceleración del pulso. También se dan repetición constantes del mismo movimiento (automatismos) y muecas. Los cuadros de extrema gravedad, en los que el enfermo, por ejemplo, se mantiene sobre una pierna durante unas semanas, solo se observan muy raras veces gracias a las posibilidades actuales del tratamiento. Solo ocurren cuando nadie se ocupa del enfermo o cuando el tratamiento no es eficaz. El pronóstico para este tipo de esquizofrenia suele ser malo.
Trastorno de la Personalidad Límite
Entre sus características se incluye un patrón de inestabilidad en las relaciones interpersonales, que son intensas, pero inestables, con idealización inicial de la pareja, aunque posteriormente aparecen sentimientos de rechazo. Realizan esfuerzos frenéticos por establecer relaciones personales con cualquier persona a la que tienen acceso, implicándose de modo exagerado en la relación para evitar el abandono, real o imaginario. Establecen relaciones que pasan de la inicial idealización a la desvalorización acusada. Su percepción de sí mismo es igualmente inestable, pasando de la hipervaloración a sentimientos acusados de inutilidad. Presentan intensas sensaciones de vacío y soledad que intentan compensar con la relación con los demás. También existen problemas de la identidad sexual y distorsiones de la imagen corporal que acaban provocando trastornos de la conducta alimentaria, gran variedad de cambios del estado de ánimo, incluyendo la depresión, cólera, aburrimiento crónico y sensación de vacío. Las amenazas de suicidio y los episodios repetidos de autolesiones son frecuentes. Es frecuente que tengan visiones paranoides de los demás, pudiendo presentar breves episodios psicóticos, apareciendo episodios de ira inapropiada o con dificultades para controlarla. Muchos de los pacientes a los que se diagnostica este trastorno tienen un historial de abusos sexuales, aunque no está claro el papel exacto que desempeña el abuso sexual en la génesis de este trastorno.